Pienso en ti a menudo. En los días en que se me cortan las alas, En los que se me vuelven nudo las ganas, En los que la lucha es fugitiva, Y se queda mi voz a la deriva. En esos días… En que los espejos se han desvanecido, En los que veo al cielo y le pido, Que me deje rescatarme, Para de ti, no tener que alejarme. Te encuentro… En la búsqueda implacable, En lo bello de un abrazo amable, En las mañanas que figuran como bienvenidas, Y las noches que parecen almas renacidas. Tú: Que te apareces con las flores, Quién alivió todos mis temores. Con quien las montañas he escalado, Y con quien la fe perdida, he recuperado. Que no se te olvide: Que eres mi primavera. Mi sombra en la palmera, Mis ganas de no querer esperar, Y aquella voz que me dice: “Nunca es tarde para empezar” Para ti, que creíste en mí, mucho antes de que yo lo hiciera: Gracias. Porque en estos días en que se me cortan las alas, Y en los que se me vuelven nudo las ganas, Me veo a mí en la misma forma, En la que me enseñaste a hacerlo: sin sombra. Gracias. Porque en estos días que los espejos se han desvanecido, En los que veo al cielo, le pido: Que te deje ver a ti, Tan solo la mitad, de lo que eres para mí.
Te abrazo,
Anilu
me encanta leerte🫂
wow! que increíble hermana